En la localidad jujeña de Pampichuela no se reportaron casos de coronavirus y este logro es celebrado por los habitantes que es el resultado de la responsabilidad y esfuerzo colectivo.
Las primeras medidas que adoptaron cuando comenzó la pandemia fue cerrar todos los ingresos y para asegurar el abastecimiento de verduras promocionaron las huertas familiares de autosustento. Además, se recuperaron prácticas de construcción utilizando adobe y madera, y todos los vecinos se comprometieron a dar aviso si ingresaba alguna persona ajena al pueblo.
La actitud de los habitantes “fue responsable, solidaria y con gran conciencia de salud”, destacaron desde la municipalidad.
Durante este periodo debieron reestructurarse varias conductas dado que las provisiones llegaban desde otras localidades, y como muchas familias de Pampichuelase se dedican a la cría de ganado, se promovieron la creación de huertas familiares para el autosustento, que resultaron muy novedosa pudiendo asimismo disfrutar del sabor de la verdura recién cosechada.
“Aparte de promocionar las huertas familiares realizadas en cada hogar para lograr el autoconsumo en el periodo de pandemia, se logró conformar una huerta de la Comisión Municipal, donde colaboran mujeres del pueblo como Janet, Nilda, Alejandra entre muchas”, agregaron.
La labor se desarrolla de “forma solidaria y secuencial para la limpieza y mantenimiento”, y se producen: choclos, zapallos, lechugas, chauchas, papas, remolachas y zanahorias, según informaron desde el Tribuno de Jujuy.
Por otro lado, el cierre de los ingresos dificultó el acarreo de materiales para continuar con las construcciones planificadas. Entonces idearon rescatar “construcciones ancestrales y utilizando el recurso de la naturaleza, como ser adobe, piedra y madera, lograron realizar terminaciones de casas con bloques de adobe”.
Paralelamente restauraron un gran atractivo de la zona que es el Parque del Molino. Además de intervenir el sector de la molienda de granos, edificaron bancos y mesas.
El pueblo está ubicado en las Yungas, a 85 kilómetros de la ciudad de Libertador y a 115 kilómetros de San Salvador de Jujuy, y se accede al lugar por la ruta provincial 83. Es uno de los asentamientos urbanos más antiguos de la región, destacaron las autoridades municipales al subrayar que Pampichuela es un vocablo quechua que significa “Pampa chica”.
Cuenta con un destacamento policial, sala de primeros auxilios, Registro Civil, Comisión Municipal, escuela primaria y secundaria, agua potable y energía eléctrica.
La capilla, que fue construida en el año 1932, tiene por patrono a San Santiago Apóstol, cuya imagen fuera traída desde España y donada por el entonces diputado Herminio Arrieta, y como homenaje se la llevó en andas desde Libertador hasta Pampichuela.
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