Este lunes el gobierno de Jujuy dio a conocer las medidas restrictivas adoptadas para los festejos de carnaval, que contemplan limitar la circulación entre distintas localidades, reducir las ceremonias y la cantidad de personas en los encuentros en casas de familias.
El ministro de Seguridad, Guillermo Corro, y el secretario de Turismo, Diego Valdecantos, dijeron a través de una videoconferencia que las restricciones que comenzarán a regir a partir del jueves con los festejos del “Jueves Comadres” y se extenderán hasta la finalización de los feriados de carnaval.
“Para carnaval se va a restringir la circulación en todo el territorio provincial desde el jueves 11 hasta el martes 16 de febrero, es decir las personas no pueden trasladarse a las distintas localidades”, señaló el titular de la cartera de seguridad.
Sin embargo, aclaró que habrá “excepciones” para las personas o grupos familiares que cuenten con una propiedad en una zona diferente a la de su residencia habitual, y para visitantes que tengan reservas de hoteles o alquileres temporario.
Los eventos que se realicen durante los días de la fiesta popular “están limitados solamente a almuerzos y cenas show en bares o locales, los que en ningún caso serán bailables y deberán contar con la autorización de Comité Operativo de Emergencia (COE) local”, se indicó.
Otro requisito será tener “la aprobación del protocolo sanitario del COE provincial” y “confeccionar una lista con los datos de las personas que ingresen a lugares habilitados”.
La capacidad de los locales “no podrán superar el 50 por ciento de capacidad del inmueble o predio” pero de manera general el límite de concurrentes es de 300 personas.
Sobre las ceremonias de desentierro, entierro y chaya de mojones, sitios considerados sagrados para los comparseros donde se lleva adelante un sentido ritual para la llegada del carnaval, “estarán habilitadas hasta un máximo de 20 personas, debiendo gestionar autorización a la Secretaria de Cultura provincial”, dijo Corro.
Asimismo, advirtió que las reuniones familiares no podrán superar las 20 personas tal como contempla el decreto firmado por el gobernador Gerardo Morales que prevé multas de hasta un millón de pesos en caso de infringir las disposiciones.
Por su parte, hacedores culturales de la Quebrada de Humahuaca y Puna jujeña consideraron que las disposiciones “no tienen en cuenta el hecho cultural de desentierro del diablo”, al considerar que “muchos de los disfrazados mantienen promesas de sumo valor cultural durante el rito”.
Los diablos suelen confeccionar sus disfraces “a modo de promesa con la tierra y la institución a la que pertenecen, además se implican como padrinos en los mojones, los cuales están alejados de los centros urbanos”, añadieron, y solicitaron la extensión de horarios para llevar adelante el ritual.
Asimismo señalaron que los hombres que se mimetizan en un diablo de la alegría deben salir a las calles, con protocolos establecidos, “en un tiempo de cosecha grande para la región y que se debe celebrar tal como se celebra hace más de cien años”.
m1