Luego de una prolija investigación la Policía detuvo a tres sujetos y retuvo a un menor, implicados en una causa judicial por Lesiones y Tentativa de Homicidio. Se secuestró un revolver calibre 22, quedando todo a disposición de la justicia.
Del hecho se tomó conocimiento a las 13 horas del lunes último, cuando efectivos de la Comisaría Laguna Blanca se constituyeron hasta calle Alem y Ayacucho del barrio Belgrano, donde se entrevistaron con dos hombres de 20 y 50 años (padre e hijo) quienes informaron que momentos antes en circunstancias de desplazarse en una motocicleta 110 cilindradas, fueron interceptados por cuatro hombres, entre ellos un menor, quienes los agredieron físicamente mediante la utilización de un elemento contundente, ocasionándole lesiones.
Luego observaron que uno de los sujetos tomó un arma de fuego y accionó la cola del disparador en reiteradas ocasiones, pero afortunadamente no se efectuaron los disparos, logrando ambas víctimas resguardarse en un inmueble que se hallaba en las inmediaciones hasta tanto los agresores se retiraron del lugar.
Los auxiliares de la justicia realizaron las diligencias procesales con la colaboración del perito de la Delegación Policía Científica, secuestrándose en la escena del hecho dos botellas de vidrio y un trozo de madera, cuyos elementos habrían sido utilizados para la agresión. Al respecto se inició causa judicial por el delito “Lesiones y Tentativa de Homicidio” con intervención de juez de turno.
Abocados a las tareas investigativas, numerarios de la Unidad Regional Cuatro, de la Comisaría local y Delegación Drogas Peligrosas, todos con asiento en Laguna Blanca, aprehendieron en la vía pública a tres sujetos de 23, 25 y 27 años respectivamente, y se retuvo a un menor de 15 años, sindicados como presuntos autores de las agresiones.
A través de un importante trabajo de campo, recolección de datos y testimonios de interés para la causa, también se secuestró un revólver calibre 22 que habría sido utilizada en el hecho.
Detenidos, retenido y secuestros fueron conducidos hasta la dependencia policial, los mayores se notificaron situación legal y quedaron alojados en celdas de esa unidad operativa; en tanto el menor fue entregado a su representante legal conforme legislación vigente.