El gobierno de la Provincia de Buenos Aires prohibió este miércoles que todas las farmacias la venta de los productos de pruebas rápidas para detectar coronavirus, al señalar que esos test “son de uso profesional excluyente y deben realizarse en laboratorios de análisis clínicos”.
Lo hizo a través de la Resolución 1533 publicada en el Boletín Oficial, donde advirtió de sanciones en caso de incumplimientos.
La medida tendrá vigencia mientras perdure la declaración del estado de emergencia sanitaria en el ámbito de toda la provincia a tenor de la enfermedad por el nuevo coronavirus.
En los considerandos de la disposición, el Ejecutivo bonaerense recordó que “todos los test para Covid-19 que se encuentran actualmente disponibles son de uso profesional exclusivo y deben realizarse en condiciones e instalaciones adecuadas, por ello son de venta exclusiva a laboratorios de análisis clínicos”.
Apuntó, además, “que está claramente normado en los procedimientos sanitarios Covid-19, que cualquier resultado debe estar cargado en el SISA (Sistema Integrado de Información Sanitaria Argentina) por un profesional inscripto que sea titular de un laboratorio habilitado por la autoridad competente”.
“En esa línea, unos de los objetivos del SISA es crear la Ficha Única del ciudadano como eje central para el registro de la información sanitaria, que evidentemente podría violarse si e comprador del producto realiza por sí mismo la prueba”, se señaló.
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