El servicio es gratuito. Está disponible los martes y jueves, y forma parte del abordaje integral que reciben los pacientes con a. Esta semana, dedicado al tratamiento del pie diabético.
Continuando con el apoyo y acompañamiento a los pacientes que necesitan rehabilitación debido a diversas patologías, el gimnasio terapéutico del Hospital de Día 2 Abril, llevó adelante una jornada dedicada a la prevención del pie diabético.
La referente del servicio de kinesiología y quien se encuentra a cargo del gimnasio terapéutico, licenciada Luciana Velazco, explicó que los pacientes que tienen diabetes “deben tratarse de manera especial los pies” para evitar la famosas lesiones del pie diabético.
Por ese motivo “les enseñamos, los movimientos que deben hacer, también como masajearlos y como tratarlos en general, para mejorar sobre todo la circulación y oxigenación de los pies, algo fundamental en el paciente con diabetes”, precisó.
Y amplió que, a la vez, “buscamos mejorar la sensibilidad y propiocepción de los mismos para evitar caídas y tropiezos”, refiriéndose a los estímulos que aportan determinados ejercicios a la zona de los pies, para que el cerebro reaccione de manera inmediata, activando los músculos necesarios para evitar caídas y posteriores lesiones, por ejemplo”.
Destacó la relevancia del tema abordado en esta oportunidad, porque muchos pacientes “que tienen esta enfermedad, no le dan importancia a esta parte del cuerpo que les parece tan lejana pero que es sumamente importante en cuanto al cuidado”.
Comentó que, por ejemplo, las manos, están más a la vista y si hay algo raro “como ser una lesión, lo vemos rápido”, en cambio, con los pies no pasa eso. Es una zona que los pacientes diabéticos la descuidan mayormente y así muchas veces, hay lesiones que pasan desapercibidas y evolucionan hasta convertirse en graves si no son tratadas a tiempo”.
Encuentros semanales
El hospital de Día 2 de Abril, brinda a la comunidad el servicio del gimnasio terapéutico, destinado especialmente a pacientes que requieren realizar actividad física, como parte del tratamiento de recuperación de su enfermedad.
En su mayoría “son pacientes con enfermedades crónicas no transmisibles: diabetes, hipertensión arterial, colesterol elevado, sobrepeso”, indicó la licenciada Velazco. Y agregó que, desde hace unos meses “sumamos también a quienes están en tratamiento de rehabilitación pos COVID”.
Los pacientes llegan desde diferentes puntos de la ciudad “algunos derivados desde otros centros de salud y hospitales, pero también llegan por demanda espontánea, es decir porque les comenta algún vecino, conocido o familiar que conoce o sabe de nuestro servicio”, señaló.
Los encuentros son los marte y jueves, a partir de las 8.30 hs., con grupos de entre 10 y 15 personas. La actividad física se realiza, aproximadamente durante 1 hora y está dividida en cuatro etapas: entrada en calor, el ejercicio propiamente dicho, vuelta a la calma y relajación.
“Antes de iniciar la actividad, los pacientes pasan por el consultorio de enfermería y se hacen controles de rutina: tensión arterial, latidos y frecuencia cardíaca, nivel de glucosa, medición de peso. Si algún valor se ve alterado, se le comunica al paciente y se lo deriva para el control médico, y de ser necesario, se le programa un turno con el especialista”.
El servicio y la organización de los encuentros, está a cargo de un equipo interdisciplinario, conformado por profesionales de las áreas de kinesiología, nutrición, clínica médica, psicología, odontología, obstetricia y laboratorio, entre otras.
“Trabajamos de manera conjunta, aportando cada uno desde su especialidad, todo lo necesario para el tratamiento de los pacientes, porque la actividad física debe estar acompañada de controles y del seguimiento médico e interdisciplinario correspondiente para lograr los mejores resultados”, afirmó la licenciada.
Acerca del incidencia que tienen las actividades en la salud de los pacientes, puso de relieve que, a medida que van pasando los encuentros, se puede notar la evolución de los pacientes “no solo físicamente, sino, sobre todo, en el aspecto psicológico, porque poder compartir con otras personas, no solo la actividad física y el espacio, sino las experiencias en torno al problema de salud, los motiva mucho. Se forman grupos que realmente son magníficos en todos los sentidos”.