“Lo fueron a matar” mencionaron en uno de los párrafos más terribles, leído luego de la marcha con velas en Villa Gesell, por la joven que intentó reanimar a la víctima.
Todo fue dolor y lágrimas en la noche de este lunes mientras vecinos y turistas de Villa Gesell marchaban con sus velas encendidas hasta el lugar donde toda la tragedia comenzó a gestarse: el boliche frente al que asesinaron a Fernando.
Todos: familiares, amigos, conocidos, estaban unidos en el mismo pedido de justicia. Un pedido que trasciende estos lazos y que se eleva también por parte de toda la sociedad, ese porcentaje enorme de personas que no conocía a Fernando, pero que sienten el dolor de sus padres como propio, y que esperan que no vuelva a pasar, que ruegan que no sea alguien cercano la próxima víctima de la violencia.
En la puerta del local nocturno Le Brique, en pleno centro de la ciudad balnearia, comenzó la movilización minutos después de las 21 horas. Fue Virginia, la joven que intentó reanimar a Fernando la noche del trágico hecho, quien estuvo al frente de la misma, y fue la que le puso voz al silencio reinante, pidiendo que cese la violencia a la salida de los boliches y remarcando la importancia de hacer el curso de RCP. Luego fue ella misma quien leyó una carta firmada por los familiares, amigos y conocidos de la víctima.
Tras la lectura de la carta, una de las vecinas que convocó a la marcha pidió a la intendencia que decrete “un día de duelo” a raíz de lo ocurrido.
Finalmente hubo un minuto de silencio y los manifestantes colocaron las velas encendidas sobre las escalinatas del boliche.
ESTA FUE LA CARTA LEIDA POR VIRGINIA:
“Fernando es una de las personas más hermosas que conocimos y desafortunadamente, por culpa de otros que no saben sobre el significado de diversión, todo terminó en tragedia. Él siempre buscó hacer el bien al resto, nunca fue violento. No fue una pelea ni enfrentamiento: lo fueron a matar.
Fer siempre demostró cariño, compasión, humildad y todos aquellos los valores que se le pueden ocurrir a cualquiera, sin excepción alguna.
Fue un ejemplo de superación para todos nosotros, y nos transmitió muchísimo en todo el tiempo que estuvimos junto a él.
Va a estar siempre con nosotros en cada nueva etapa, y lo más importante es que lo vamos a tener cerca, sin nunca, nunca olvidarte.
Hermanito, te amamos hoy y siempre. Gracias por todo a vos y a todos los que están y estuvieron acompañándonos sin excluir a nadie por su apoyo y esfuerzo que hace”.